Un antiguo despacho de abogados muy compartimentado pero con dos puntos fuertes (una entrada en posición central y la ausencia de elementos estructurales), nos ofreció la oportunidad de concebir una vivienda donde no hay ninguna pérdida espacial en comunicaciones, consiguiéndose así un aprovechamiento máximo.
Se separa la parte privada de la pública, esta última concebida a modo de Loft.
Un auténtico "caramelito" en el corazón de Chamberí.
Fotografía: Javier Bravo Fotografía